La Cátedra “Jorge Guerra Debén” se crea en la Facultad de Ingeniería Química de la Universidad Tecnológica de La Habana “José Antonio Echeverría”.
Para la creación de esta Cátedra, de repercusión en el ámbito de la Ingeniería Química y en particular en el campo de las investigaciones relacionadas con la Industria Azucarera se ha tomado la imagen de un científico revolucionario, reconocido nacional e internacionalmente por su ciencia; dedicado desde la ciencia, a la defensa del país, con un profundo sentido antiimperialista.
Jorge Guadalupe Guerra Debén nació en La Habana, el 21 de abril de 1916. Cursó los primeros estudios en escuelas públicas y privadas y culminó el bachillerato en el Instituto de Segunda Enseñanza de La Habana, en 1933.
Concluido el bachillerato se traslada a los Estados Unidos junto a su padre, el que por razones políticas debió salir de Cuba, graduándose de ingeniero químico, con honores, en la Universidad de la Florida, en 1937. Para ayudar a su sostenimiento, trabajó en una librería cercana a la universidad durante el tiempo de duración de sus estudios.
De regreso a Cuba comenzó a trabajar en la Fábrica Sabatés S. A. Fabricantes de Jabones, detergentes, grasas y aceite comestible, como ayudante de Jefe del Departamento de grasas y aceite, pasando luego de un breve tiempo a dirigir éste y posteriormente a Jefe de Departamentos de recuperación de glicerina y fabricación de silicatos y finalmente a Jefe del Laboratorio de control general.
Durante la guerra trabajó en el diseño y puesta en marcha de una fábrica para destilación de glicerina.
En 1946 ingresa como investigador al Departamento de Física Química del Instituto Nacional de Hidrología y Climatología Médicas, donde realizó trabajos de análisis químico de aguas y luego de un curso de espectrografía y radioactividad en Saratoga Springs, Nueva York, pone en práctica los conocimientos adquiridos para el análisis de aguas minero-medicinales. En esta etapa publica cuatro artículos en la revista Archivos del Instituto Nacional de Hidrología y Climatología Médicas, relacionados con la determinación de radioactividad en las aguas de diversos balnearios y estudios espectrográficos de las aguas cubanas.
Con el objetivo de organizar y dirigir el laboratorio químico, es contratado en l948 en la Rayonera de Matanzas, y realizó un entrenamiento en una fábrica de rayón en Ohio. A su regreso fue designado Jefe de Laboratorio de la Rayonera. Como profesional, participó en la puesta en marcha de la fábrica.
En 1953 comenzó a trabajar en el departamento tecnológico de la Sección Industrial de Banco de Fomento Agrícola e Industrial de Cuba (BANFAIC). Este trabajo activo y variado lo hace entrar en contacto y conocimiento de casi todas las industrias en Cuba y sus problemas, generales, técnicos y económicos. Entre los trabajos a destacar en esa época está el informe sobre la posibilidad del bagazo como materia prima para la fabricación de celulosa y papel. Opuesto a la dictadura, renuncia a ese cargo, al considerar que no debía trabajar en un organismo de un gobierno capaz de realizar hechos como los de las Pascuas Sangrientas.
Luego de abandonar el BANFAIC, pasó en calidad de director técnico a la Williams Industrial Products Co., fábrica de ruedas y piedras abrasivas de La Habana, en donde diseñó un equipo original y práctico para mejorar las condiciones de operación. Aún sin estar vinculado a la docencia, pero como profesor innato que era, publica dos estudios acerca del desarrollo y utilización de diagramas triangulares logarítmicos y su aplicación al equilibrio de ionización de ácidos y bases débiles y sus sales, trabajos que salieron para facilitar ciertos cálculos que debían realizar los operarios.
Trabajando en la fábrica de piedras abrasivas, entró en contacto con el Instituto Cubano de Investigaciones Tecnológicas (ICIT), siendo contratado para desarrollar una máquina automática para descortezar caña de azúcar, trabajo por el cual obtuvo una patente de invención. Como resultado de este trabajo es contratado a tiempo completo y se le encomendó la tarea de construir una planta piloto para la producción de celulosa a partir del bagazo de caña y el desarrollo de un cernidor para bagazo.
Este ingeniero químico de profesión, además de cultivar al máximo la capacidad científica vinculada a su profesión, fue cultivador de la narrativa. Como constancia de sus cuentos, queda el libro “Nueve cuentos por un peso”, publicado en l959, posteriormente obtuvo la condición de miembro de la UNEAC.
Luego del triunfo de la Revolución, Cuba lo tuvo como un trabajador incansable en la labor de construcción de la nueva sociedad. Resultó trabajador de avanzada desde la creación de este movimiento y se integró a la Defensa Civil desde 1961.
En 1962 el ICIT1 se convierte en el actual ICIDCA2 y fue designado Director de este Instituto, siendo luego nombrado Asesor del Vice Ministro para el Desarrollo Técnico en el Ministerio de Industrias. En este año Integró las filas del Partido Comunista de Cuba como reconocimiento a su dedicación a la construcción de la sociedad, así como a su prestigio profesional y personal.
En 1963 se vinculó al trabajo docente en la Escuela de Ingeniería Química de la Facultad de Tecnología de la Universidad de La Habana, en una etapa en la que la carencia de profesores universitarios lo obligó a impartir un gran número de asignaturas y a la vez formar los alumnos ayudantes, que hoy constituyen la mayoría del claustro de profesores de la Facultad de Ingeniería Química del ISPJAE3 .
En 1976, recibió la categoría docente de Profesor Titular. También por este año creó el grupo de investigación azucarera de la Escuela de Ingeniería Química, el cual dirigió hasta su fallecimiento.
Recibió, por vía directa en 1981, el título de Doctor en Ciencias. En 1982 fue nombrado Profesor de Mérito del ISPJAE por sus relevantes méritos y permanente esfuerzo en el desarrollo científico nacional, así como en reconocimiento a los aportes brindados al desarrollo de la Educación Superior.
En 1983 recibió la Orden Carlos J. Finlay por su contribución a las investigaciones.
En 1984 recibió el Premio del Rector del ISPJAE por la Memoria Científica más destacada, relacionada con la Cinética de la Cristalización de Azúcar.
Fue miembro del Consejo Científico del ISPJAE, miembro de la Sección de Ciencias Técnicas de la Comisión Nacional de Grado Científico, y miembro del Consejo Científico Superior de la Academia de Ciencias de Cuba.
En 1992, su trabajo Cristalización Continua de Azúcar por Enfriamiento fue considerado Premio Relevante en el VII Fórum de Piezas de Repuesto, Equipos y Tecnologías Avanzadas.
En 1993 recibió la Distinción Especial del Ministro por su destacada labor y méritos relevantes en el trabajo científico técnico.
En 1994, el Consejo Científico Superior de la Academia de Ciencias de Cuba le otorgó la condición de Miembro de Honor.
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1. ICIT
2. El Instituto Cubano de Investigaciones de los Derivados de la Caña de Azúcar (ICIDCA) fue creado el 23 de mayo de 1963 por el Comandante Ernesto Che Guevara, con el objetivo de brindar el soporte científico al desarrollo de las tecnologías que permitieran el aprovechamiento integral y diversificado de la caña de azúcar.
3. El ISPJAE es actualmente la Universidad Tecnológica de La Habana “José Antonio Echeverría”.
Durante su vida como profesor impartió las siguientes asignaturas:
– Química Analítica
– Química Física
– Termodinámica Aplicada
– Estadística
– Análisis Instrumental
– Modelación Estadística
– Operaciones Unitarias
– Cursos especiales de Matrices
– Vectores y Tensores.
También se dedicó a la investigación y elaboración de folletos como apoyo a la docencia, los cuales se basaron en los siguientes temas fundamentalmente:
– Termodinámica Química
– Cinética Química
– Análisis Instrumental
Actualmente el texto de Estadística y Diseño de Experimentos aprobado para el Plan de Estudios, continúa siendo el elaborado por el profesor Guerra.
Entre los trabajos realizados y que constituyeron objeto de publicaciones, trabajos de diploma, tesis de especialistas, tesis de doctorados y presentaciones en eventos científicos y patentes están:
– Determinación de humedades del bagazo en equilibrio con el aire.
– Velocidad del secado del bagazo bajo condiciones constantes con flujo a través.
– Estudios sobre la precipitación de sales cálcicas y magnésicas en la clarificación.
– Desarrollo de un procedimiento balanceado para la purificación de jugos de caña.
– Caracterización de proteínas del jugo de caña.
– Estudios de adsorción de proteínas presentes en el jugo de caña.
– Diseño de un nuevo equipo cristalizador de masas cocidas.
– Desarrollo de un procedimiento para la cristalización continua de azúcar por enfriamiento.
El profesor Guerra dedicó gran parte de su vida a la investigación en la industria azucarera, realizando aportes al conocimiento científico relacionados con la química física de los procesos de purificación y cristalización de azúcar, los que le fueron reconocidos mediante patentes de invención, premios y en una vasta correspondencia con personalidades del mundo azucarero.
En los trabajos de investigación básica aplicó el método científico, según el cual el conocimiento de los sistemas modélicos, de menor complejidad, permiten la interpretación de los sistemas complejos, a los que se llega añadiendo elementos complementarios. Así, por ejemplo, en los estudios de purificación de jugos, partía de sistemas modélicos agua-sacarosa a los que incorporaba paulatinamente los iones de interés. Una vez concluido el estudio y conociendo las leyes que regían el proceso pasaba a la prueba en jugos reales.
La perseverancia, la tenacidad, la profundización en la interpretación de los resultados, caracterizaron su trabajo de investigación, cualidades trasmitidas a sus colaboradores.
Todo profesional que tuviera una duda o requiriera de una orientación, encontró en el profesor Guerra un interlocutor dispuesto a colaborar, brindando sus criterios, sugerencias y experiencias, con la modestia y sencillez que le caracterizaron. Así, eran asiduos a su local de trabajo, profesionales de muy diversas ramas y centros.
Entre las acciones que aparecen recogidas en su trayectoria están :
– Estudio reológico de la pulpa de mineral de Moa.
– Estudios sobre aspectos del diseño de planchas eléctricas para Comercio Exterior.
– Estudio sobre el calor de reacción de un proceso para la producción de derivado biliar para el MINSAP.
– Estudio de la optimización de medios diagnósticos para el MINSAP.
– Estudio de un dispositivo para la defensa costera para el MINFAR.
Distinciones que hablan del reconocimiento de que fue objeto y continúa siéndolo, para la comunidad de ingenieros, tales como:
– Medalla 250 Aniversario de la Universidad de La Habana, otorgada por el Consejo de Estado (1979).
– Distinción “Rafael María de Mendive”, que otorga el Sindicato de los Trabajadores de la Educación, la Ciencia y el Deporte (1989).
– Orden “Frank País” de 2do Grado, otorgada por el Consejo de Estado (1991).
– Orden “Lázaro Peña” de 1er Grado, otorgada por el Consejo de Estado (1993).
– Título de Héroe del trabajo de la República de Cuba, otorgado por el Consejo de Estado (1993).
La acción de la Cátedra va dirigida a fomentar un Grupo de Trabajo, formado por estudiantes y profesores, que por el estudio de su obra y por la prática diaria del trabajo investigativo, se forme en los mejores valores Patrios por los que él siempre luchó.
Su creación responde a una necesidad real, por cuanto sistemáticamente se hace alusión a su obra, a los resultados de sus investigaciones y a rasgos de su personalidad que obligan a explicar quién fue, a los que no lo conocieron, sobre todo a los estudiantes. El conocimiento acerca de este científico cubano, profesor de Ingeniería Química, es de una repercusión educativa trascendental entre estudiantes y profesores, en lo ético profesional y en lo político.
– Nuclear un Grupo de Trabajo Investigativo asociado a su obra científica, que aporte resultados concretos de carácter científico y técnico al desarrollo de la Industria Azucarera, a la cual estuvo ligado una buena parte de su vida.
– Trabajar en la formación de valores en los estudiantes que desarrollen actividades científicas en el Grupo.
– Promover la realización de encuentros de generalización donde se expongan y divulguen a la comunidad científica nacional e internacional, los resultados producto de las investigaciones del Grupo, tal como él siempre actuó: sin ocultarle a nadie el producto de su ciencia.
– Seleccionar los mejores trabajos estudiantiles de investigación azucarera anualmente, en el marco de la Jornada Científica Estudiantil.
Presidente Honorífico: Dr. Ramiro Guerra Valdés
Presidente Ejecutivo: Dr. Rolando Santana Machado.
Vicepresidente: Dra. Cándida Díaz Ramírez.
Vicepresidente: Dra. Lourdes Zumalacárregui de Cárdenas
Profesores vinculados al Grupo Azúcar
Colaboradores del CNCA
Profesionales de otros organismos del MINAZ.
Estudiantes de la Facultad vinculados al Grupo Azúcar.
Antes de enviar su formulario de solicitud tener en cuenta que:
En la carrera del ingeniero químico en Cuba, lo primero que me gustaría resaltar es la distinción que existe entre el ingeniero químico y el licenciado químico, la carrera de Bioquímica, y cualquier otra asociada a la Química que se estudia en la Universidad de La Habana, quizás lo haría sólo con un ejemplo actual.
Estas carreras forman los especialistas que son la base de cualquier descubrimiento científico, por ejemplo, los cinco candidatos vacunales, a lo que se suman los médicos. Este grupo descubre, después de un largo y dedicado período de investigación en los laboratorios, cuáles son las mejores variantes de lograr un producto que sirva para combatir el Covid 19, y ¿cuál es el papel del ingeniero químico entonces?
Pues el ingeniero químico será el encargado de garantizar la producción a gran escala de esos candidatos vacunales, lo cual también es un papel esencial en la lucha contra esta enfermedad. Producir millones de vacunas a partir de un esquema a escala industrial, empleando el equipamiento idóneo, logrando las capacidades necesarias y velando por lograr esto con el menor costo posible es la tarea del ingeniero químico.
Esto mismo se extiende a otras industrias, como la industria de los alimentos, la industria farmacéutica, la industria del petróleo, y otras muchas.
El ingeniero químico estudia los fundamentos químicos y físico-químicos necesarios para lograr su objetivo esencial; así como las operaciones físicas que permiten planear un proceso productivo cualquiera, los reactores químicos necesarios a la tecnología en particular y las asignaturas necesarias, para asegurar una sostenibilidad económica de la escala productiva.
No puede dejarse de mencionar su papel en la lucha por el saneamiento ambiental, donde participa decisivamente en la concepción de procesos que garanticen el menor nivel posible de liberación de contaminantes al medio ambiente.